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Nacer pa’semilla

Columnista invitada

 

Por: Natalia Zuluaga Rivera.

 

“Es que no importa morirse, al fin uno no nació pa’ semilla. Pero morirse de una, para no tener que sentir tanta miseria y tanta soledad.”

Alonso Salazar.

 

 

 

 

¿Por qué un niño, por qué un menor de tan solo 15 años ya es jefe de una banda criminal en Moravia- comuna 4 de Medellín? ¿Por qué ese niño, que debería estar en el colegio cursando noveno grado, está en las calles hurtando, delinquiendo y armado con una pistola 9mm? ¿Por qué ese menor es el jefe de una banda criminal de tráfico de estupefacientes y es el que da las órdenes de quién muere y a quién se le “perdona la vida” en el barrio?

 

Soy Defensora Pública, adscrita al Sistema Nacional de Defensoría Pública -Regional Antioquia hace 8 años. Hace 3 años asumo la defensa de niños y adolescentes vinculados al Sistema Penal para Adolescentes y la realidad de los menores que delinquen es la más dura realidad a la que me he enfrentado en mi profesión de abogada penalista.

 

Muchos de los niños y adolescentes que he conocido, ya nacen marginados en sus barrios, nacen en hogares sin futuro, y cuando hablo con ellos y les pregunto por sus padres, esto me encuentro: un padre condenado a 20 años de prisión o un padre que nunca conocieron, un padre que los abandonó al nacer. En otros casos, una madre que también hace parte de la red de microtráfico para la que ellos trabajan.

 

En otros casos, esas madres son mujeres con problemas de consumo de estupefacientes, drogadicción y alcoholismo, madres jóvenes dedicadas a la prostitución, que no pueden hacerse cargo del cuidado de sus hijos y, en el mejor de los casos, una madre que debe salir temprano a trabajar y debe dejar a su hijo de 5 años a merced de los vecinos del barrio que lo “cuidan” mientras este juega en la calle o le echen un ojo mientras la mamá regresa ya en horas de la tarde. Así tuve un caso en el barrio Villatina de la comuna 8 de Medellín, con un final trágico, que algún día contaré.

 

Luego de conocer el informe de Medellín cómo vamos, solo me queda un sentimiento de dolor inmenso e impotencia por los niños de mi ciudad:  desnutrición crónica, deserción escolar, violencia intrafamiliar. Conclusión, un estancamiento en lo social. Los programas que beneficiaban a nuestros niños y adultos mayores, no avanzan.

 

Estos son solo algunos de los datos desalentadores del informe, que dejan en evidencia la falta de interés de la Alcaldía de Medellín en los programas sociales que benefician a la primera infancia y que ahora se encuentra desenfocado por los problemas de contratación al interior de la Administración, por la mala remuneración a sus profesores y que, además, genera desconfianza en los padres de estos niños hacia la institución.

 

Se le olvida a esta Alcaldía que si garantizamos bienestar a nuestros niños, estamos garantizando tranquilidad a los adultos. Los niños que están creciendo en nuestra ciudad, lo están haciendo sin buena alimentación, sin buena educación, sin buen acompañamiento de los padres o cuidadores que los orienten en su primera infancia y les tiendan la mano en el paso a un colegio para su educación formal: estamos permitiendo que estos niños nazcan y crezcan marginados, que no sean semilla en la Medellín Futuro.

 

Porque si hay hambre en un hogar, hay violencia, un niño mal nutrido no aprende, no se divierte y no se relaciona adecuadamente con otros; un niño mal nutrido, sin acompañamiento escolar adecuado, es un delincuente en potencia para la ciudad; un niño sin educación no sabrá relacionarse con otros; un niño, un adolescente con hambre sale a robar y no nace pa’semilla.

 

La responsabilidad está en nosotros. Nuestra tarea es hacer que la Alcaldía de Medellín priorice la inversión en la primera infancia en las 16 comunas y los 5 corregimientos, que no se escatime en recursos para proyectos sociales de los niños y adolescentes, estamos formando la Medellín Futuro y si queremos que nuestros niños y niñas sí nazcan pa’semilla, llegó la hora de hacer de esta ciudad un mejor lugar para vivir, un mejor lugar para que los niños crezcan. El futuro de ellos, tiene que ser la esperanza, el progreso y la felicidad.

 

Julio 26 – 2022

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